En 1905 fundó con otros estudiantes el grupo Die Brücke (El puente) que pretendía un estilo plano de colores puros inspirado en el arte primitivo y el fauvismo francés. Este grupo y Der Blaue Reiter formaron la segunda oleada expresionista.
Los temas son generalmente escabrosos en sintonía con la forma de mostrarlos: prostitución, locales nocturnos de dudosa reputación, calles angostas con personajes trajeados...
Kirchner siguió viviendo en Dresde hasta 1911. Después se marchó a Berlín, donde supo reflejar la agitación y el movimiento de una gran ciudad moderna. En 1914 con el estallido de la primera guerra mundial, fue movilizado, pero sufre una grave crisis nerviosa.
A su vuelta de la guerra en 1915, su situación mental no mejoró y su salud se resintió más tras sufrir un atropello. Optó por la tranquilidad de Davos (Suiza), donde siguió pintando, en su mayor parte, paisajes más tranquilos, menos estimados por la crítica actual.
En 1937, en plena ascensión del nazismo, su arte se calificó de arte degenerado y se destruyeron muchos de sus trabajos. Su precaria situación emocional empeoró a raíz de ello y se suicidó en Frauenkirch, cerca de Davos, en 1938.
Aquí pueden ver algunas obras de E. L. Kirchner